miércoles, 26 de diciembre de 2007

Papá Noel existe!


Antes de seguir contando la cantidad de cosas que me han pasado a lo largo de dos semanas, tengo que hacer un inciso. Este finde, milagrosamente conseguimos que uno de nuestros múltiples proyectos saliese adelante y ElAmigo, Nanita, Cantautor, un amigo de ElAmigo al que a partir de hoy llamaré Manitas (porque es fisio, da unos masajes pa' morirse y porque además, por lo que me han contado, cocina genial) y yo, nos fuimos de viaje. Hay muchas anécdotas por medio, pero quiero hablar de un despiste a la vuelta, de una mochila olvidada en el tren con cartera y cámara de fotos en su interior. 19:30h de la tarde, el tren llega a Madrid, cojo la mochila grande, la maleta y la bolsa donde había llevado la comida, y me olvido de mi saquito preciado, que no echaré de menos hasta el día siguiente por un motivo: para cenar en casa de mi abuela no me piden DNI o dinero, y mi familia es lo suficientemente numerosa como para q haya al menos 7 cámaras de fotos, la mía no se necesitaba. Llegué a casa corriendo, me cambié, me atusé un poco y en coche con mi padre hasta el centro de reunión familiar. Todos los primos pululando y gritando por el salón, botellas de vino y cava que se iban descorchando y la prima Caris, que es la viejilla con los enanos comiéndole la oreja para que cantase villancicos con ellos (me cansan, pero en el fondo me encanta :D) Entre pitos y flautas nos dieron las 4 de la mañana hablando y medio recogiendo. Amenacé con chupar ojos al niño que me despertase y me fui a dormir, hasta el día siguiente, que mi primo de 3 años ilusionado con Papá Noel vino a la buhardilla donde dormimos todos en colchones y con un cazo más grande que él y una cuchara, incitado por su padre, nos dio el toque de queda a todos. Me levanté desayuné, me quedé de nuevo frita tomando un poco el solete y luego vuelta a poner mesa para la comida.La tarde fue para mi prima, estuve hablando con ella un montón, que ya era hora, y a eso de las 8 llegaba a casa y me daba cuenta que quería salir pero no tenía cartera, que quería enseñar las fotos del viaje, y no tenía cámara. ¡¡Mierda!! Sentimiento de: soy un desastre, sólo me pasa a mí, hay que joderse, ya no me queda nada por perder, dónde lo habré dejado...¡ajá! en el tren...no cogí la mochilita... Momento estrés, cinco inspiraciones,calma, piensa...llamo a renfe y no me lo cogen. Aisss...qué rabia!! cero de saldo, voy a recargar ¡si no tengo la tarjeta!¡anda!¡las tarjetas! Muaks, muaks..papá,mamá, me voy a dar una vuelta. Corro al cajero, llamo al banco y anulo la tarjeta, respiro de nuevo. Bueno, llego tarde, que había quedado. Y exactamente igual que cuando creía que oía voces, pensé en no contarlo hasta que al día siguiente me confirmasen en renfe que no había nada en objetos perdidos. Total, que sólo se lo conté a Elamigo y a Nanita, y nos dio más pena por las fotos del viaje que por otra cosa. Hoy me he levantado, he recogido un poco mi cuarto y todavía con la legaña en el ojo he ido a llamar a la estación cuando de pronto, suena el timbre. Un hombre rubio, de unos 40, con cazadora de cuero, sin barba blanca ni abrigo rojo preguntaba por Caris. ¡Me había traído la cartera hasta casa! y la mochilita la tenía en el coche, me ha identificado y me ha dicho: espera, que ahora te subo el resto. ¡y estaba todo! Me han dado ganas de pegarle un achuchón, pero no era apropiado. Todavía queda gente honrada por el mundo. Ha llegado un día tarde, sin disfrazar y en forma de trabajador de Renfe, pero Papá Noel existe!!!
FELIZ NAVIDAD BLOGGEROS!!

2 comentarios:

Unknown dijo...

Afortunadamente todavía queda gente buena en el mundo. Felices fiestas ;)

Nebulina dijo...

Ostras que guay!!! me alegro^^ al final resultará que quedan buenas personas, escondidas..pero quedan.
Un besazo y feliz navidad!