lunes, 31 de diciembre de 2007

Aunque queda atrás, resumiré los puntos importantes de aquél fin de semana tan ajetreado:
El sábado, descansadita como estaba, quedé con una amiga de clase para cenar. Nanita también había quedado por otro lado, pero, al final, como los planes cena y salir son compatibles nos dio la sorpresa y se unió a nosotras. Iba a ser sólo una cena...así que de postre un S Francisco que alegra el alma ¡error! ya había que seguir de fiesta. Así que, la de clase se fue a casa y Nanita y yo a pasar el rato a Chueca, donde otras tantas ya esperaban en la cola del antro verde. Entramos un poco tarde, pero esta vez los planetas se alinearon rápido y una chica con camisa roja se me acercó y me dijo: ¿bailas salsa? No le quería mentir, pero no era plan de perder oportunidades, así que, ingenuamente :P dije que... de vez en cuando, pero que me enseñase. Total, que cuatro palabras y un par de bailes que era ya tarde (...) y al día siguiente, yo, con mis tres horas de sueño estaba corriendo por un campo de baloncesto, como un tempanito de hielo del frío que hacía y pensando en lo a gusto que se estaría en la cama, cuando de repente la veo que aparece con sus dos amigas a las que había levantado de la cama. En ese momento no das crédito, era casi imposible, ¡pero era verdad! me hizo muchísima ilusión. Quedé con ellas para dar una vuelta por la tarde, y el domingo me lo pasé viendo luces de navidad por el centro, riéndome con las canarias y merendando café con churros. Recuperé un poco la ilusión de saber que todavía existía gente así en el mundo y que alguna podía incluso encajar conmigo.
El domingo por la noche le había prometido a mi hermana la Enana una cena en frente de la tele a base de huevos con patatas, así que, me puse a freír, mi ojo, más que el huevo. Recibo un mensaje de la Canaria, me dice lo mismo, que ha sido genial, pero que es una pena que no pueda ser...
Lunes, la ella se va, su avión salía por la mañana. Le mando un mensaje para saber si ha aterrizado y mi sorpresa llega cuando me llama por la tarde... se acabó la biblioteca.
Y pasó la semana, la última de exámenes, el viernes nos íbamos de viaje: 3 días de descanso, fiesta y turismo. Respiramos la sensación de independencia, de piso de estudiantes.

Llegué a Madrid de nuevo sorprendida, por todo en general, y feliz, por alguien más en concreto.¡¡Feliz año a todos!! Parece que el 2007 sale de balance muy positivo!! Ayer cumplí un año desde que ElAmigo y yo salimos la primera vez por esa zona de Madrid que no debe ser nombrada, y mirando hacia atrás, de nuevo creo que tengo que dar las gracias a todos los actores implicados en mi película este año pasado, y desear que 2008 entre con el mismo buen pie. Bsts

miércoles, 26 de diciembre de 2007

Papá Noel existe!


Antes de seguir contando la cantidad de cosas que me han pasado a lo largo de dos semanas, tengo que hacer un inciso. Este finde, milagrosamente conseguimos que uno de nuestros múltiples proyectos saliese adelante y ElAmigo, Nanita, Cantautor, un amigo de ElAmigo al que a partir de hoy llamaré Manitas (porque es fisio, da unos masajes pa' morirse y porque además, por lo que me han contado, cocina genial) y yo, nos fuimos de viaje. Hay muchas anécdotas por medio, pero quiero hablar de un despiste a la vuelta, de una mochila olvidada en el tren con cartera y cámara de fotos en su interior. 19:30h de la tarde, el tren llega a Madrid, cojo la mochila grande, la maleta y la bolsa donde había llevado la comida, y me olvido de mi saquito preciado, que no echaré de menos hasta el día siguiente por un motivo: para cenar en casa de mi abuela no me piden DNI o dinero, y mi familia es lo suficientemente numerosa como para q haya al menos 7 cámaras de fotos, la mía no se necesitaba. Llegué a casa corriendo, me cambié, me atusé un poco y en coche con mi padre hasta el centro de reunión familiar. Todos los primos pululando y gritando por el salón, botellas de vino y cava que se iban descorchando y la prima Caris, que es la viejilla con los enanos comiéndole la oreja para que cantase villancicos con ellos (me cansan, pero en el fondo me encanta :D) Entre pitos y flautas nos dieron las 4 de la mañana hablando y medio recogiendo. Amenacé con chupar ojos al niño que me despertase y me fui a dormir, hasta el día siguiente, que mi primo de 3 años ilusionado con Papá Noel vino a la buhardilla donde dormimos todos en colchones y con un cazo más grande que él y una cuchara, incitado por su padre, nos dio el toque de queda a todos. Me levanté desayuné, me quedé de nuevo frita tomando un poco el solete y luego vuelta a poner mesa para la comida.La tarde fue para mi prima, estuve hablando con ella un montón, que ya era hora, y a eso de las 8 llegaba a casa y me daba cuenta que quería salir pero no tenía cartera, que quería enseñar las fotos del viaje, y no tenía cámara. ¡¡Mierda!! Sentimiento de: soy un desastre, sólo me pasa a mí, hay que joderse, ya no me queda nada por perder, dónde lo habré dejado...¡ajá! en el tren...no cogí la mochilita... Momento estrés, cinco inspiraciones,calma, piensa...llamo a renfe y no me lo cogen. Aisss...qué rabia!! cero de saldo, voy a recargar ¡si no tengo la tarjeta!¡anda!¡las tarjetas! Muaks, muaks..papá,mamá, me voy a dar una vuelta. Corro al cajero, llamo al banco y anulo la tarjeta, respiro de nuevo. Bueno, llego tarde, que había quedado. Y exactamente igual que cuando creía que oía voces, pensé en no contarlo hasta que al día siguiente me confirmasen en renfe que no había nada en objetos perdidos. Total, que sólo se lo conté a Elamigo y a Nanita, y nos dio más pena por las fotos del viaje que por otra cosa. Hoy me he levantado, he recogido un poco mi cuarto y todavía con la legaña en el ojo he ido a llamar a la estación cuando de pronto, suena el timbre. Un hombre rubio, de unos 40, con cazadora de cuero, sin barba blanca ni abrigo rojo preguntaba por Caris. ¡Me había traído la cartera hasta casa! y la mochilita la tenía en el coche, me ha identificado y me ha dicho: espera, que ahora te subo el resto. ¡y estaba todo! Me han dado ganas de pegarle un achuchón, pero no era apropiado. Todavía queda gente honrada por el mundo. Ha llegado un día tarde, sin disfrazar y en forma de trabajador de Renfe, pero Papá Noel existe!!!
FELIZ NAVIDAD BLOGGEROS!!

miércoles, 19 de diciembre de 2007

Anuncios de navidad

¿Qué pasa este año con los anuncios de colonias? salen todos en medio-bolas... esto es increíble, el de María Carey, Diesel... que luego me tengo que poner a estudiar, un poquito de porfavor...

martes, 18 de diciembre de 2007

Un fin de semana intenso

Me despisto y las anécdotas se me acumulan… voy por partes.
Después de que el examen del viernes, la psicología salió de la carpeta para quedar apartada en la esquina de mi mesa hasta que el polvo me avise de que es hora de archivarlo. Este día iba a ser completito:
Con mis 5 horas mal dormidas y con ojeras que me caían hasta los pies, reviso la agenda y veo: 16h-cardiólogo. Salgo del examen y apunto mentalmente: 18h-amigas, hemos quedado para ir al Sedna, aquel sitio al que prometí no volver después de haber cerrado el local cuando allá por marzo del año pasado estaba con la primera Ella. 15:45h-recibo una llamada: oye, que vamos con retraso, que te pases mejor a las cuatro y media. Entonces echo cuentas, y veo que se me solapan planes, para variar, llamo a las de la facultad y aviso de que llegaré tarde. Como es costumbre en mí, cuando acabo exámenes me dedico un tiempo YO, completamente egocéntrico y superficial, una hora en el baño, exfoliación, limpieza facial y todo lo que se preste… así que al mediodía desaparecí de la vida social familiar y cuando todos creían que me había ahogado salía yo del baño, con las mismas ojeras, pero mucho más relajada. Con las mismas me puse el chándal y me dirigí al médico. ECO, electro y prueba de esfuerzo (en un cuchitril, que creía que me evaporaba mientras corría, con un corazón bradicárdico que no llegaba a las 200 pulsaciones para que parasen la maldita cinta… 17 min corriendo hasta llegar a una pendiente del 20% con chorretes del calor…¡oye, que ya va a ser que paro eh?! ) Y así, ya rematado mi estado de cansancio me fui a casa, pringosa por el gel de la ECO, y con halos de pegamento por mi cuerpo por culpa del electro. Tal cual llegué a mi casa me eché en la cama y me dormí media hora. Luego me duché de nuevo, me arreglé un poco y salí hacia el Sedna. Cuando llegué se estaban yendo, eran las 7 y cuarto. Al ver que llegaba decidieron quedarse un poco más, y acompañarme en mi clarita. Por suerte, no fui la última en llegar, de hecho me tocó entretener al personal y ejercer de mono de feria parlanchín cargado de anécdotas absurdas hasta que llegó Nanita. Y es que, entre otras cosas, he visto dos estrellas fugaces del tamaño de sandías que surcaban el cielo de Madrid de lado a lado, y si no lo he dicho, me fascinan las estrellas… y es que, el finde anterior tuve un semi-contacto inesperado de nuevo con el género masculino, semi porque sólo él puso de su parte y yo corté el tema con un triste: “creo que te estás confundiendo”, y es que (y se me acababan las historias, por lo menos las narrables).
Así pasó la tarde entre juegos de mesa, me di cuenta de lo relativo que es el movimiento de los palillos chinos según la perspectiva (altura) desde la que se juegue, y recordé que en un partido de fútbol, por la letra “O” lo que hay son claramente “ostias”.
Dieron las 10, y había quedado para cenar con una amiga del colegio y su correspondiente novio (tb amigo). Me llevaron a un sitio de tapas bien ricas y allí cayó otra clarita. Y mi cuerpo que no conoce la palabra alcohol-deshidrogenasa, con el tute que llevaba de todo el día, decidió que enlazar con el siguiente plan que era fiesta en el colegio mayor de la Extremeña, compañera de clase, ya era demasiado. Me fui a casa y a la 1 caí rendida en la cama…me estaba quedando frita y recibo una llamada, la Extremeña, más pedo que Alfredo diciéndome que le parecía fatal que no fuese. Y es que no tenía fuerzas para vagabundear luego por Madrid con el frío que hacía en busca de un búho, por mucho que me apeteciese conocer a sus amigas, que como ella, también entienden. Por fin la calma…zzzzz…hasta el sábado a las dos de la tarde, que me dolía la cabeza de dormir!! ¡qué sensación!¡qué placer más doloroso!¡qué ojos de sapo! No me enteré ni de que mis padres se habían ido y me habían dejado solita el fin de semana. Esto fue sólo el comienzo…
TO BE CONTINUED.

jueves, 13 de diciembre de 2007

Tormenta de verano 13 sept 2007



Se quejan de que no publico, de que escribo y me lo guardo. He rebuscado entre mis cuadernos de apuntes, y he encontrado esto:

Y hoy suena la lluvia que cae sobre un tejado, son tormentas de verano, esporádicas, sin importancia, que dejan rayos que rompen el cielo y lo dividen en dos mitades de forma tan intensa que es imposible borrarlos de la mente, pero que son fugaces, tanto como la luz que traen con ellos. Y pasan unos instantes, y llega la voz del trueno que descarga sobre tu hombro, como un martillazo que quiere hacerte poner los pies en la tierra, que une de nuevo el cielo.Choca entonces la realidad con la magia y la belleza deja que caigan lágrimas en forma de gotas de lluvia que sólo transmiten felicidad y que dejan tras de sí un olor característico que cada vez que tengas la oportunidad de volver a respirar, traerá consigo de nuevo la noche, el rayo y el trueno... revivirás lo que movió tus emociones y la tierra mojada quedará marcada por huellas que las hojas en otoño taparán, que serán protegidas o disimuladas por flores en primavera, pero que quedarán de nuevo al descubierto cuando llegue el próximo verano, al corazón.

Son cosas que se escriben, se guardan y quedan archivadas, por vergüenza, porque no se comprenda, porque lo escribes en un momento determinado y parece que fuera de ese instante las palabras ya han perdido el significado. Las sensaciones cambian, pero, supongo, que a cada uno se le avivan de nuevo de una manera.

domingo, 9 de diciembre de 2007

He visto la luz...

...literalmente, que he salido de mi casa media hora y casi me ciegan los rayos de sol. Desde que empezó esta maratón de tercero, nuestra vida social se reducía a uno o dos días a la semana de 23:00h a 1:00h, y la luz natural quedaba para alumbrar los apuntes. Esta mañana, cuando mi neurona ha dicho basta, las zapatillas me esperaban y los cascos me daban musiquilla. He llegado al Retiro y olía a otoño, las hojas que están cayendo de los árboles tapan ya las que han sido más precoces ya empapadas y rotas en el suelo, dando ese olor característico de tierra y hoja mojada que se mezcla con el aire frío respirado y el calor del sol sobre la piel. Mientras vas avanzando entre niños con gorros medio caídos y bufandas que van arrastrando por el suelo, ancianos dando su paseo del aperitivo y guitarristas bucólicos, te das cuenta de que se te ha olvidado que tenías cosas que hacer, que no tienes tiempo, que tienes que correr. Una sonrisita invisible te va apareciendo en la cara sobre la que el sol intenta reparar el color azul flexo y la luz ya no te molesta, los colores son más vivos y el resto de neuronas se han despertado. Llego a casa, me ducho y ya estoy lista para otra tarde de embutir conceptos. Y una canción que levanta sensaciones...