jueves, 28 de febrero de 2008

Al principio de los tiempos, cuando creí que me habías pillado

POR UNA MIRADA 13-ene-07

Y es entonces cuando te das cuenta de que te ha mirado fijamente, y que en el segundo en que ha clavado sus ojos en ti te ha preguntado lo que sientes, lo que dudas, lo que crees… y sabes que escudriña tu gesto para conseguir pistas. Y por si acaso lo adivinan esos ojos que no soportas, bajas la mirada, callas y te quedas pensativa, sintiendo que se te ha acelerado el corazón y siempre con tu duda, ¿lo sabrá?, o mejor ¿lo sé yo?Y mientras, la oscuridad se alterna con la luz, a la vez que entra y sale la gente y yo vivo en la inopia, absorta en mis pensamientos que siempre giran en torno a lo mismo y que me están quemando poco a poco.Y mientras, la oscuridad se alterna con el azul profundo, a la vez que sigo creándome un paralelismo taciturno, del que no quiero salir por miedo a lo desconocido, pero en el que veo una ventana, a través de una pupila expectante que me impulsa a tirarme por ella, arriesgar, caer al vacío…Y es entonces cuando me toca a mí acabar el trayecto y dejar de pensar, seguir a la gente, seguir mi camino ficticio de todos los días. Ves la luz, andas hasta casa y para poder tener un rato de descanso te buscas otro problema en que pensar, te convences de que es al que hay que dar prioridad, y sigues viviendo en la duda, pero sigues viviendo, porque de vez en cuando la ignoras y te crees en un acto de fe que no necesitas sentir más allá de lo que has sentido a lo largo de tu vida, y que aunque no encaje una pieza de tu puzzle, puedes seguir viviendo tranquilamente como si lo hubieses terminado, el resto de piezas son capaces de disimular la que falta. Nada más lejos de la realidad…

domingo, 24 de febrero de 2008

Anuncios

Por fin, aunque parezca mentira (y en realidad lo es), puedo decir que he acabado (por lo menos por este fin de semana).
Y acabar implica empezar a tachar de la lista de recaditos todo lo que poco a poco se va haciendo. Mi cuarto ya no se cae tan a cachos, aunque todos los papelotes siguen en perfecto desorden. He cambiado, por fin, la música del ipod, que empezaba ya a cansarme; al final el modo aleatorio era casi hasta predecible. Y poco a poco iré poniendo cosillas en orden.
Por otro lado, como ya sabía yo, nada más acabar, me he constipado, creo que es porque ante el bajón de defensas de exámenes, lo único que me protege es la dosis de estrés que tengo, y al desaparecer, el primer bicho que haya en el aire me ataca.
Una duda ¿hacia qué lado movéis la cuchara? Porque yo sé que remuevo como no se debe, en sentido antihorario, y me han llamado zurda frustrada. Y ¿hacia qué lado besáis? Porque yo era de sentido horario, pero creo que me he vuelto ambidiestra. En fin, que es una curiosidad como otra cualquiera, como la que tengo por saber cuándo será el día en que no abran la puerta o dejen una perdida cuando no son bienvenidos ( si es que las 4 debe ser hora de llamar, ya sean de la tarde o de la mañana, que no importa).
Y a lo tonto ya van dos meses geniales, de no enterarse que pasa el tiempo, de que pasen las horas voladas. Me temo que la existencia de marzo este año va a ser taaan relativa…
Por si no lo he dicho ¡ya estoy con la bata delante de los pacientes!¡ Qué alegría, qué alboroto! Y el otro día caí en manos de una cirujana plástica que me demostró que hay gente que todavía conserva el sentido de la profesión, salí de la consulta prometiéndome que de mayor sería como ella, bueno, una mezcla de ella y mi madre :D.

Y po último...

martes, 19 de febrero de 2008

Porque me apetece

Hoy me apetece decirte algo bonito, pero busco en el desorden de mi cabeza y sólo encuentro palabras empalagosas que no me sirven, frases estereotipadas que descarto.
Sigo queriendo darte las buenas noches con algo más que un hasta mañana, los buenos días con un toque o las buenas tardes con un qué tal.
Y podría seguir divagando líneas y líneas sin decir nada, intentando transmitir sólo que estoy tranquila, feliz, que no puedo evitar seguir buscando una palabra que se ajuste a ti. Esta noche descuento otra vez las horas que me impiden tener tiempo, aunque ya te lo he dicho, creo. Echarte de menos también tiene su aliciente, como todo lo bueno, se hace esperar. Que duermas bien. Hasta mañana.

jueves, 7 de febrero de 2008

Ángulo muerto

Voy sintiendo, que no pienso en blanco, que las líneas se tuercen, que el sol ya me va acariciando. Me imagino una playa de luz roja y naranja, y dos siluetas confundidas, que se difuminan. Parece que se quieren tocar, pero están separadas ¿o es al revés? Es posible que se estén tocando, aunque parezca que existe distancia.
Ya no existen ángulos muertos, sólo reflejos. No quedan ciegos, sólo atentos. Ya no preguntan todo, secretos. Y aún así hay momentos en que el espejo distrae al atento y los secretos se hacen nuestros.

Y que viva el cotilleo en la facultad y la velocidad de comunicación boca a boca!
Por cierto, mi entrenador de baloncesto me dijo con la chulería y orgullo machito que él tiene (es un poco fantasma...) que a un amigo le habían hecho una (al loro) 'cronoscopia', vaya, una colonoscopia, que le habían metido una camarita por el culo... Le dije: ¿qué? y me respondió que una 'cronoscopia' de nuevo. No le corregí... pero una compañera dijo: "Una colonoscopia" y va y la corrige: "No, no! a mi amigo una cronoscopia, seguro, será otra cosa..." Y lo dice tan seguro, que hasta dices ¿seré yo la que no sabe qué es una cronoscopia?. Así que si estoy viviendo en la ignorancia, avisadme, pero creo que esto es una morcilla...

sábado, 2 de febrero de 2008

DIN,DON,DIN

Ya estamos en el carro, ya ha empezado la época de ponernos a prueba, de ver cuántos días somos capaces de mantener una capacidad mental al 200% y durmiendo un 50% (bueno, exagero un poco, que dormir hasta duermo, como los bebés a los que el cuello no les sujeta la cabeza, me falta la baba).
De momento la cosa no va mal, y aprovechando que ayer tuvimos examen, para romper con la rutina y vencer el aplatanamiento mental, el comando biblioteca de la facultad organizó un partidillo de fútbol a última hora de la tarde. Ahí aparecimos, dispuestas a darlo todo, a descargar la adrenalina retenida en las largas horas de biblioteca y a reírnos un rato. Lo mejor vino en el tercer tiempo. Ahí estábamos, siete mujeres, en chándal, con cervezas y unos pinchos, con peligro de agujetas abdominales por el desternille de la conversación. Una hablaba de que tenía un conejo, de que les ofreció un funeral a sus peces tocándoles la guitarra, otra de un coche cuatro plazas, chistes de humor ‘inteligente’ y mientras yo secándome los lagrimones de la risa.
Nos dieron las mil y monas en el bar y luego no había quién se despidiese, ¡es taaan agradable la vida social! Así que, todavía con el sudorcillo del partido, sin fuerzas para irse de marcha a ningún sitio, optamos por película en casa, de aforo reducido. Una de Kill Bill 2, y por fin me enteré de qué iba la historia (porque en la 1 me dormí y todo…) Y tempranito a recogerse, que hoy tocaba estudiar, para no romper tradiciones.

Hechos y acontecimientos:
La semana pasada: mi madre trajo los que ya hemos denominado mis hermanas y yo ‘trikiwis’, es decir, kiwis que parece que se reproducen por gemación porque son como tres pegados. Estábamos en la mesa, ya en el postre, y mi madre habla de la ganga de los trikiwis. Nadie los quiere y consiguió una bandeja por euro y medio. Yo estaba un poco a mi bola y mi madre me preguntó: “¿Entiendes?” obviamente refiriéndose a porqué estaban tan baratos, pero yo que escuchaba a medias, respondí con una sonrisa, jj, “sí mamá”
No sé cuándo: la punta de la nariz es hipersensible a la presión, hay gente que hasta sabe tomar el pulso carotídeo con ella :D
El día antes del examen: mi flexo dijo basta. Se cansó de estudiar y empezó a dar latigazos intermitentes de luz. Por poco provoca en mí un ataque, pero lo solucioné. Ahora mi hermana pequeña no tiene bombilla.
En un momento de apertura al mundo: me enteré de que a una mujer le han aumentado su memoria retrógrada al intentar intervenir en el hipotálamo. ¡Por favor que me pinchen a mí también por ahí! Me da un poco de miedo, podemos llegar a ser máquinas memorizantes con un toque certero. Por otro lado, ¿será el inicio de la cura del Alzheimer? ¡¡Qué estupendo gran error de la ciencia!! Sólo falta que lo sepamos utilizar.
Por cierto... la amiga que me vio en la plaza de Chueca recibió un mensajito sutil, de los que incitan a alguna respuesta...pues no ha contestado ¿qué se pasará por su cabeza? Qué miedito!

DIN, DON,DÍN…